La Batalla Oculta en el Ministerio: La Salud Mental
A menudo oímos grandes historias de éxitos ministeriales: una iglesia que florece, una organización sin ánimo de lucro que celebra su 50 aniversario, un grupo entero de personas no alcanzadas que escucha el Evangelio y se salva.
También oímos historias trágicas de fracasos ministeriales: una iglesia cierra sus puertas, un conocido pastor tiene una aventura, una organización sin ánimo de lucro maneja mal los fondos y pierde su reputación.
Pero entre esas historias -tanto las buenas como las malas-, de lo que no oímos hablar es de la salud mental de quienes dirigen el ministerio. La verdad es que el ministerio y la salud mental rara vez se mencionan juntos. Detrás de los éxitos y los fracasos, los problemas de salud mental pueden afectar a los que sirven, y ya es hora de que empecemos a hablar de ello.
¿Por qué a menudo se pasa por alto la salud mental en el ministerio?
Abordar las razones de la falta de apoyo a la salud mental en el ministerio es complejo. Muchos líderes ministeriales luchan en silencio, por miedo a ser juzgados o a las consecuencias. Queremos iniciar la conversación destacando nuestra reciente entrevista en Instagram Live con Rebecca Gorman sobre el tema «La importancia de la salud mental en el ministerio».
Rebecca trabaja como Directora del Diario Rezar por Cero y ha realizado prácticas de asesoramiento en Wycliffe Bible Translators. Recientemente se ha graduado con un máster en terapia matrimonial y familiar. Tiene un corazón para el pueblo de Dios en el frente, deseando que caminen en toda la libertad y abundancia que Dios compró para ellos, no sólo para proclamarlo a los demás, sino para experimentarlo realmente ellos mismos.
Rebecca comparte ánimos y pasos prácticos que podemos dar para priorizar nuestra salud mental mientras servimos en el ministerio. Mira la entrevista aquí.
El estigma de la salud mental en las comunidades cristianas
El estigma cultural en torno a la salud mental es mayor en muchos círculos cristianos. El asesoramiento suele considerarse un último recurso, sólo necesario en caso de crisis. Pedir ayuda puede percibirse como debilidad. «No necesitas asesoramiento, sólo necesitas rezar más, leer más la Biblia y reprender esos pensamientos negativos». Aunque la mayoría de los cristianos no dirán estas cosas en voz alta, es el trasfondo del pensamiento en muchas iglesias, ministerios y comunidades cristianas. Este estigma aísla a los líderes, dificultándoles admitir cuándo necesitan apoyo.
La realidad del aislamiento y el agotamiento en el ministerio
No es raro que los que están en el ministerio luchen contra el aislamiento, el cansancio e incluso el agotamiento. Muchos sienten que no pueden pedir ayuda por miedo a perder su ministerio o su puesto. Un artículo reciente de Christianity Today analiza el estrés particular al que se enfrentan los misioneros, señalando que incluso cuando se dispone de apoyo para la salud mental, muchos prefieren sufrir en silencio antes que arriesgarse a perder su puesto.
Este «sufrimiento en silencio» tiene efectos perjudiciales para su bienestar general. Otras investigaciones ponen de relieve una realidad sorprendente: los niveles de estrés de los misioneros son de dos a tres veces superiores a los del estadounidense medio, lo que aumenta el riesgo de padecer problemas de salud importantes.
Superar las barreras para el apoyo a la salud mental en el ministerio
Para quienes trabajan en el ministerio y desean ayuda, encontrar el apoyo adecuado puede resultar abrumador. Los misioneros, en particular, suelen vivir en zonas remotas donde no hay servicios locales de asesoramiento, o carecen de Internet fiable para la terapia virtual.
En nuestra entrevista de Instagram Live, Rebecca Gorman aborda otros retos de salud mental en el ministerio:
«Predicamos el Evangelio de un Dios que nos nutre, nos reconforta y nos invita a estar con Él y a descansar. Sin embargo, los ministros del Evangelio luchan por aceptar ese consuelo para sí mismos. El trauma desempeña un papel importante en ello. Presencian acontecimientos traumatizantes con regularidad y, con el tiempo, se disocian para seguir adelante.»
Señala que una disociación prolongada puede hacer que los líderes ministeriales se sientan desconectados, predicando un mensaje de esperanza y refugio que no están experimentando personalmente.
Pasos Prácticos para Priorizar la Salud Mental en el Ministerio
Las palabras de Rebecca están llenas de empatía y sabiduría, y nos recuerdan lo imprescindible que es el apoyo a la salud mental para un ministerio sostenible y floreciente. Ofrece consejos prácticos sobre cómo los líderes ministeriales pueden empezar a dar prioridad a su salud mental mientras sirven a los demás. En la entrevista, aborda los siguientes puntos:
- Errores comunes en el ministerio relacionados con la salud mental
- La raíz de por qué la gente en el ministerio a menudo pasa por alto los beneficios potenciales del asesoramiento
- Cómo la evitación del asesoramiento puede contribuir significativamente al agotamiento en el ministerio
- Pasos prácticos para encontrar ayuda y acceder a los servicios de salud mental
Mira la entrevista completa aquí.
Rezamos por un mundo en el que sea normal necesitar ayuda y ser proactivos con nuestra salud mental, tanto en el ministerio como en nuestra vida cotidiana. Si tú o alguien que conoces necesitáis apoyo en salud mental, te animamos a que primero pidas referencias dentro de tu comunidad de amigos y familiares. A menudo, alguien que conoces puede saber de un buen consejero o puede indicarte la dirección correcta. Si no puedes encontrar ayuda a través de tu comunidad, intenta buscar «consejeros cristianos» o «terapia de base cristiana» en tu zona.
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